lunes, 17 de junio de 2019

Poema de la Semana (XXIII)

Concluye este curso 2018-19, en el que hemos intentando, semana tras semana, acercar la poesía a nuestra comunidad escolar. Para dar paso al obligado  paréntesis veraniego, os ofrecemos una poesía de Jacob Meléndez Martínez (Córdoba, 1928),  padre de Enrique Meléndez, profesor de tecnología del IES Alhaken II. El poema está dedicado a la nieta del poeta e hija de nuestro compañero, en el momento alegre y emocionante de su nacimiento.

A MI NIETA CLARA

Clarísima, que no Clara...
así luces tanto, tanto,
que nos ofrece tu encanto
la dádiva de tu cara.

Mi verbo, por comprensivo,
califica tu delicia,
y pongo, haciendo justicia,
tu nombre en superlativo.

En la niebla voy perdido,
pero alcanzo a comprender,
que un día serás mujer
y me darás al olvido.

Puesto a pedir, pediría
que en cualquier tiempo futuro
diera a mi rincón oscuro
tu sol rayos de alegría.

Yo sé que eres mi consuelo.
Si te contemplo, mi niña,
hay un alma que se aniña,
y es el alma de tu abuelo.

Significas ilusión
en la vida de mi hijo,
y yo, con amor, dirijo,
a Dios por ti mi oración.

Eres humana presea,
y si tu nombre pronuncio,
me ha conmovido el anuncio
de una vida que alborea.


domingo, 9 de junio de 2019

Poema de la Semana (XXII)

Esta semana contamos con una doble propuesta. Rosa Muñoz, profesora de Lengua y Literatura del IES Alhaken II y jefa de dicho departamento didáctico, nos recomienda dos poemas tan breves como intensos. El primero pertenece al sevillano Luis Cernuda (1902-1963), integrante de la Generación del 27, y se titula Contigo:


CONTIGO

¿Mi tierra?
Mi tierra eres tú.
¿Mi gente?
Mi gente eres tú.
El destierro y la muerte
para mí están adonde
no estés tú.
¿Y mi vida?
Dime, mi vida,
¿qué es, si no eres tú?


El segundo poema es Llegó con tres heridas de Miguel Hernández (1910-1942), uno de los poetas más relevantes del siglo XX en lengua española. 

LLEGÓ CON TRES HERIDAS

Llegó con tres heridas:
la del amor,
la de la muerte,
la de la vida.

Con tres heridas viene:
la de la vida,
la del amor,
la de la muerte.

Con tres heridas yo:
la de la vida,
la de la muerte,
la del amor.



miércoles, 5 de junio de 2019

5 de junio: Día del Medio Ambiente

Desde 1974 se celebra el 5 de junio el Día Mundial del Medio Ambiente, proclamado como tal por la ONU el 15 de diciembre de 1972. El objetivo es, una vez más, tener «la oportunidad de ampliar las bases de una opinión pública bien informada y de una conducta de los individuos, de las empresas y de las colectividades inspirada en el sentido de su responsabilidad en cuanto a la conservación y la mejora del medio.»


Cada año le corresponde a un país diferente acoger las conmemoraciones y actos oficiales; este año 2019, este honor le ha sido encomendado a China, precisamente uno de los países más contaminados del mundo. Por cierto, este año el tema elegido es la contaminación del aire, algo que está en relación directa con el preocupante cambio climático y con la salud de la población.


Desde este blog queremos unirnos al esfuerzo colectivo tan necesario para frenar el deterioro del medio. Te animamos a practicar los buenos hábitos medioambientales que bien conoces y a promover su práctica entre las personas de tu entorno. Y como la información precede a la acción, aquí te dejamos un enlace donde encontrarás diversos recursos sobre el medio ambiente que pueden interesarte:



domingo, 2 de junio de 2019

Poema de la Semana (XXI)


Iniciamos el mes de junio con paso firme hacia el verano, cercanos ya el final del curso y las merecidas vacaciones. Esta semana nos hace su propuesta Rosario Pérez Alcalá, profesora de Geografía e Historia del IES Alhaken II, gran aficionada a la lectura.


Ella nos recomienda un soneto de Antonio Gala (1930), famoso escritor, guionista y dramaturgo, cordobés de adopción, aunque manchego de nacimiento. La faceta poética de Gala es quizás menos conocida, pero llegó a recibir un accésit del Premio Adonais de poesía en el año 1959 por su obra Enemigo Íntimo. Este soneto, titulado «Condena», pertenece a su obra Sonetos de la Zubia.



«CONDENA»
A trabajos forzados me condena 
mi corazón, del que te di la llave. 
No quiero yo tormento que se acabe, 
y de acero reclamo mi cadena. 

Ni concibe mi mente mayor pena 
que libertad sin beso que la trabe, 
ni castigo concibe menos grave 
que una celda de amor contigo llena. 

No creo en más infierno que tu ausencia. 
Paraíso sin ti, yo lo rechazo. 
Que ningún juez declare mi inocencia, 

porque, en este proceso a largo plazo 
buscaré solamente la sentencia 
a cadena perpetua de tu abrazo.