domingo, 8 de marzo de 2020

Poema de la Semana (XXI)


El pasado día 1 de marzo fallecía en su Nicaragua natal el poeta, sacerdote y político Ernesto Cardenal (1925-2020). De ideas marxistas revolucionarias, el padre Cardenal fue uno de los máximos exponentes de la llamada teología de la liberación, movimiento que surgió en América del Sur en la década de 1960 y que propugnaba la vuelta a la esencia del cristianismo que predicó Jesús.

Sin embargo, y al margen de su apasionante vida como activista político y social, que le llevó a fundar la comunidad cristiana de Solentiname, por la que fue severamente amonestado por el papa Juan Pablo II, Cardenal fue un estudioso de la literatura y un gran poeta, que llegó a ser candidato al Premio Nobel de Literatura. No lo consiguió, pero sí obtuvo otros reconocimientos importantes, como el prestigioso Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda en 2009.

La obra poética de Ernesto Cardenal gira en torno al amor, a la política y a la religión. Para daros a conocer una muestra de su poesía, hemos elegido un poema breve - epigrama - que dedicó a Claudia, una joven bibliotecaria de Managua que conoció en su juventud, antes de ordenarse sacerdote en 1965.

EPIGRAMA

Te doy Claudia, estos versos,
porque tú eres su dueña.
 
Los he escrito sencillos
para que tú los entiendas.
 
Son para ti solamente,
pero si a ti no te interesan,
un día se divulgarán,
tal vez por toda Hispanoamérica...
 
Y si al amor que los dictó,
tú también lo desprecias, 
otras soñarán con este amor
que no fue para ellas.
 
Y tal vez verás, Claudia,
que estos poemas,
(escritos para conquistarte a ti)
despiertan en otras parejas
enamoradas que los lean
los besos que en ti
no despertó el poeta.


viernes, 6 de marzo de 2020

8M Soy de la Generación Igualdad

Un año más celebramos el 8 de marzo Día Internacional de la Mujer. Instituido por la Asamblea de las Naciones Unidas en 1975, el 8M es una fecha clave para reivindicar y visibilizar la labor de las mujeres, haciéndolas protagonistas del día a día, como debería ser lo habitual.


Lo cierto es que el papel de las mujeres en nuestra sociedad ha cambiado sustancialmente - y para mejor - en las últimas décadas. Pero es innegable que todavía nos queda un buen trecho que recorrer en pos de la igualdad de género. Ahí es donde las nuevas generaciones de jóvenes debéis recoger el testigo de la lucha que llevaron a cabo vuestras madres y abuelas.



Os animamos, chicos y chicas, a luchar por esta igualdad que, además de justa, nos hace avanzar como sociedad y también como individuos. Para ello, destacamos algunos enlaces que os pueden interesar.







lunes, 2 de marzo de 2020

Poema de la Semana (XX)

En esta semana en que celebraremos el Día de la Mujer, queremos participar de esta conmemoración a través de una brillante poeta y escritora, la colombiana Piedad Bonnett (1951). 


Bonnett es licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de los Andes, donde es profesora de Literatura desde 1981. Madre de tres hijos desde muy joven, ha sabido compatibilizar su trabajo como profesora con su dedicación a la literatura y el cuidado de su familia, un caso bastante común entre las mujeres de su generación que decidieron seguir carreras profesionales. Lo que ya no es tan común es sufrir una tragedia personal desgarradora, como fue la pérdida de su hijo menor, el pintor Daniel Segura Bonnett, quien se quitó la vida a los 28 años, tras una década de lucha contra la esquizofrenia.


Piedad Bonnett publicó su primer libro de poemas, De círculo y cenizas, en 1989. A este han seguido ocho libros más de poesía, cinco obras teatrales y seis novelas, entre las que destaca Lo que no tiene nombre, dedicada a su hijo dos años después de su muerte. Ha sido galardonada con varios premios y menciones de renombre.

Hemos seleccionado para vosotros dos hermosos poemas, que seguro os emocionarán.

LAS CICATRICES


No hay cicatriz, por brutal que parezca, 
que no encierre belleza. 
Una historia puntual se cuenta en ella, 
algún dolor. Pero también su fin. 
Las cicatrices, pues, son  las costuras  
de la memoria, 
un remate imperfecto que nos sana
dañándonos. La forma
que el tiempo encuentra 
de que nunca olvidemos las heridas.

(De Explicaciones no pedidas, 2011)

NI LOS SUEÑOS...

Ni los sueños, donde tu rostro tiene todas las formas de la dicha,
ni el sol que tanto amo sobre mi cuerpo desnudo,
ni la grata canción del antiguo trovero enamorado,
ni el verso de Darío ni el verso de Quevedo,
ni esta luna que brilla con brillo de alcancía,
ni tu nombre por otros pronunciado,
ni el eco de mis pasos en la inmensa catedral solitaria,
ni el rosal que yo siembro con mis manos y me sangra los dedos,
ni las noches insomnes,
ni tu dulce retrato mentiroso,
ni el tiempo, -ese falsario de mil rostros-
pueden calmar mi pena de no verte.


(De Poesía reunida, 2015)