miércoles, 30 de noviembre de 2022
25 N. La lucha continúa
jueves, 24 de noviembre de 2022
25N. La lucha continúa
Un año más tenemos que volver a poner en un primer plano la violencia de género, una de las lacras más duras de nuestra sociedad. Y es que a pesar del empoderamiento de la mujer en todos los ámbitos - laboral, social y cultural-, seguimos lamentando el sufrimiento de cientos de mujeres, maltratadas y en ocasiones asesinadas por sus parejas.
Desde nuestra biblioteca Wallada y junto con toda la comunidad educativa del IES Alhaken II, queremos mostrar tolerancia cero ante la violencia contra las mujeres. Y nos sentimos orgullos@s de nuestros alumnos y alumnas, que así lo entienden; ellos y ellas tienen la misión de construir una sociedad libre de violencia y más justa.
Asimismo, queremos felicitar a nuestros alumnos premiados en el reciente Concurso de Literatura Hiperbreve Ilustrada contra la Violencia de Género. Ellos son Bruno Lorite González de 1º ESO A y Claudia Aguilera Moyano de 4º ESO B. Sus magníficos trabajos han sido distinguidos con sendos segundos premios en distintas categorías del concurso. ¡Muy merecidos!
Felicitamos también desde aquí a todos los participantes, así como a sus profesores y profesoras.
¡Enhorabuena por vuestro excelente trabajo!
domingo, 20 de noviembre de 2022
El poema de la semana (LXIII)
Su nombre real era Juana de Asbaje y Ramírez de Santillana; no se sabe con certeza su fecha de nacimiento puesto que, a pesar del acta de bautismo de una niña con el mismo nombre en 1648, el padre Diego Calleja, quien realizó la primera aproximación biográfica de la escritora, ofrece como fecha 1651.
El hecho de ser hija natural, algo frecuente en la época, no parece haber supuesto un problema especialmente serio para la autora; al revés, parece que este hecho dotó de más fuerte personalidad tanto a la autora como a su madre y hermanas. Octavio Paz señala que la sociedad hispanoamericana era bastante permisiva en las relaciones ilícitas.
La mayor parte de los datos relativos a su infancia nos los cuenta la misma sor Juana Inés en su Respuesta a sor Filotea. Allí nos refiere su obsesión por el saber, como demuestra el hecho de convencer, con tres años, a la maestra de una de sus hermanas para que le enseñara a leer. Aprendió enseguida a leer y a escribir y a los ocho años ya compuso su primera loa.
Hacia 1659 se trasladó con su familia a la capital mexicana. Apenas contaba 14 años cuando, impresionados todos por su talento y precocidad, pasó a ser dama de honor de la virreina recién llegada, Leonor Carreto, marquesa de Mancera. Aprendió latín en tan solo veinte lecciones con Martín de Olivas (a quien dedicó su poema «Máquinas primas de su ingenio agudo»). Podéis ver hasta qué punto llegaba la exigencia de sor Juana en este fragmento de la Respuesta a sor Filotea, donde cuenta cómo aprendió latín:
«Empecé a aprender gramática, en que creo no llegaron a veinte las lecciones que tomé; y era tan intenso mi cuidado, que siendo así que en las mujeres –y más en tan florida juventud– es tan apreciable el adorno natural del cabello, yo me cortaba de él cuatro o seis dedos, midiendo hasta dónde llegaba antes, e imponiéndome ley de que si cuando volviese a crecer hasta allí no sabía tal o tal cosa que me había propuesto aprender en tanto que crecía, me lo había de volver a cortar en pena de la rudeza. Sucedía así que él crecía y yo no sabía lo propuesto, porque el pelo crecía aprisa y yo aprendía despacio, y con efecto le cortaba en pena de la rudeza: que no me parecía razón que estuviese vestida de cabellos cabeza que estaba tan desnuda de noticias, que era más apetecible adorno.»
La entrada en el convento en busca del «sosegado silencio de mis libros»
A pesar de la fama que ya tenía Juana Inés, en 1667 ingresó en un convento de las Carmelitas descalzas de México, al parecer invitada por su confesor, el poderoso jesuita Antonio Núñez de Miranda. Sin embargo, solo estuvo cuatro meses y lo abandonó por problemas de salud. Dos años después ingresó en un convento de la Orden de San Jerónimo, donde realizó los votos perpetuos y permaneció el resto de su vida. En su Respuesta indicaba: “Entréme religiosa porque para la total negación que tenía al matrimonio, era lo menos desproporcionado y lo más decente que podía elegir”.
En estos años fue clave la presencia del padre Núñez —confesor a su vez de los virreyes— quien animó a Juana Inés a entrar religiosa e incluso corrió con los gastos de la fiesta de su profesión (24 de febrero de 1669). Pedro Velázquez de la Cadena proporcionó la dote y narra González Obregón (Méjico Viejo) que “recibió el velo de manos del canónigo Don Antonio de Cárdenas y Salazar”.
Entre el abandono de las carmelitas y la elección de las jerónimas, regresó a la Corte unos meses. Fue en ese momento cuando tuvo lugar la anécdota que relató el marqués de Mancera y que recoge Calleja (Fama y obras póstumas): el virrey reunió en 1668 a los cuarenta hombres más sabios de Nueva España para que la examinaran y dictaminaran si su sabiduría era adquirida o natural “y atestigua el señor Marqués […] que a la manera que un galeón real […] se defendería de pocas chalupas, que le embistieran, así se desembarazaba Juana Inés de las preguntas”.
Unos conventos no tan silenciosos…
La reclusión de sor Juana en el convento de las jerónimas no suponía necesariamente una vida de pobreza y oración. Las celdas de las monjas jerónimas eran como pequeños apartamentos de dos pisos con una cocina y una sala. Para su cuidado se permitía a las monjas tener esclavas, como indica un documento en el que sor Juana vendió a una hermana su esclava mulata, Juana de San José. El provincial franciscano fray Mateo de Herrera quiso limitar el número de sirvientas en los conventos y fracasó al oponerse las monjas, que llegaron a acudir a la Real Audiencia.
Aparte de estos lujos, la vida en el convento para sor Juana una oportunidad de poder dedicarse a leer y estudiar:
Pero el sosegado silencio de sus libros se vio acompañado a menudo por la conversación con escritores, poetas y filósofos que convirtieron la celda de sor Juana en un punto de encuentro y de reunión. En ella también llevó a cabo experimentos científicos, reunió una nutrida biblioteca con más de 4.000 volúmenes gracias a los cuales adquirió conocimientos de teología, astronomía, pintura, lenguas, filosofía,… y hasta compuso obras musicales.
Durante una década sor Juana Inés de la Cruz aprendió rodeada de lo más granado de la cultura mexicana masculina y poco a poco moldeó su estilo de escritura, que varió de lo filosóficamente serio a lo irreverentemente cómico, muy al límite de lo profano. Escribió una extensa obra que abarcó diferentes géneros, desde la poesía y el teatro hasta opúsculos filosóficos y estudios musicales.
En este video tenéis una minibiografía de Sor Juana Inés de la Cruz y si queréis conocer más de su obra pincha AQUÍ
domingo, 13 de noviembre de 2022
El poema de la semana (LXII)
Que sea como el temblor que la sostiene.
Que se mantenga como un latido."
El poeta venezolano Rafael
Cadenas fue confirmado este jueves como ganador del Premio Cervantes,
el mayor honor literario de la lengua española. El Ministerio de Cultura y
Deporte de España, que lo entrega, subrayó que “se trata del primer autor
premiado de nacionalidad venezolana, lo cual ensancha el ámbito geográfico de
premiados con este galardón”.
Cadenas, de 92 años, ha publicado más de 20 libros, donde
despliega sus herramientas conceptuales con potencia en la poesía y el ensayo.
De su obra, algunos destacan los poemarios Intemperie, Amante y Contestaciones.
El jurado destacó “su vasta y dilatada obra literaria” y
reconoció “la trascendencia de un creador que ha hecho de la poesía un motivo
de su propia existencia y la ha llevado hasta alturas de excelencia en nuestra
lengua”.
Nacido en Barquisimeto, en 1930, Cadenas pertenece a la
“generación de 1960” y formó parte del grupo Tabla Redonda, junto con Arnaldo
Acosta Bello, Jesús Guédez, Ángel Eduardo Acevedo, Darlo Lancini, José Barroeta
y Sanoja Hernández.
Es traductor de poesía inglesa, fue profesor universitario y
cuenta con una amplia obra de ensayo considerada una referencia del pensamiento
literario contemporáneo en español, con títulos como En torno al lenguaje y los
Apuntes sobre San Juan de la Cruz y la mística, según la propia biografía
publicada por el ministerio español.
La obra poética y ensayística de Cadenas lo ha hecho
merecedor de reconocimientos como el Premio San Juan de la Cruz (1992), el
Premio de la Fundación Mozarteum de Venezuela (1993), el Premio FIL de
Literatura en Lenguas Romances (2012) y el Premio Reina Sofía de Poesía
Iberoamericana (2018).
que ante todo competidor me he sentido débil
que perdí los mejores títulos para la vida
que apenas llego a un sitio ya quiero irme (creyendo que mudarme es una solución)
que he sido negado anticipadamente y escarnecido por los más aptos
que me arrimo a las paredes para no caer del todo
que soy objeto de risa para mí mismo que creí
que mi padre era eterno
que he sido humillado por profesores de literatura
que un día pregunté en qué podía ayudar y la respuesta fue una risotada
que no podré nunca formar un hogar, ni ser brillante, ni triunfar en la vida
que he sido abandonado por muchas personas porque casi no hablo
que tengo vergüenza por actos que no he cometido
que poco me ha faltado para echar a correr por la calle
que he perdido un centro que nunca tuve
que me he vuelto el hazmerreír de mucha gente por vivir en el limbo
que no encontraré nunca quién me soporte
que fui preterido en aras de personas más miserables que yo
que seguiré toda la vida así y que el año entrante seré muchas veces más burlado en mi ridícula ambición
que estoy cansado de recibir consejos de otros más aletargados que yo ("Ud. es muy quedado, avíspese, despierte")
que nunca podré viajar a la India
que he recibido favores sin dar nada en cambio
que ando por la ciudad de un lado a otro como una pluma
que me dejo llevar por los otros
que no tengo personalidad ni quiero tenerla
que todo el día tapo mi rebelión
que no me he ido a las guerrillas
que no he hecho nada por mi pueblo.
martes, 8 de noviembre de 2022
Luis Landero, Premio Nacional de las Letras Españolas 2022
Este lunes 7 de noviembre, el Ministerio de Cultura y Deporte ha concedido el Premio Nacional de las Letras Españolas 2022, al escritor extremeño Luis Landero (Alburquerque, 1948).



domingo, 6 de noviembre de 2022
El poema de la semana (LXI)
Te amo con un amor inalterable…»
Te amo con un amor inalterable,
mientras tantos amores humanos no son más que espejismos.
Te consagro un amor puro y sin mácula:
en mis entrañas está visiblemente grabado y escrito tu cariño.
Si en mi espíritu hubiese otra cosa que tú,
la arrancaría y desgarraría con mis propias manos.
No quiero de ti otra cosa que amor;
fuera de él no te pido nada.
Si lo consigo, la Tierra entera y la Humanidad
serán para mí como motas de polvo y los habitantes del país, insectos.
Ibn Hazm
Abu Muhammad Ali Ibn Hazm (en árabe: أبو محمد علي بن احمد بن
سعيد بن حزم) nació en Córdoba, Al-Andalus (actual Andalucía), el 7 de noviembre
de 994.
Su familia era originaria de la kûra de Lebla (actual provincia de Huelva).
Filósofo, polígrafo, teólogo, historiador, narrador y poeta hispano-árabe, hijo
de un alto funcionario de Almanzor, fue visir del califa Abderramán V.
Participó en las guerras que dieron fin al califato Omeya, por lo que fue
encarcelado; al quedar en libertad sufrió un breve destierro, tras lo que
abandonó la política, dedicándose sólo a escribir y a sus estudios de teología
y derecho, abandonó el rito Malequí y adoptó el rito Zaharí.
Debió exiliarse en diferentes taifas de Al Andalus tras la crisis del califato,
exilio que le llevó a recorrer varias taifas, entre ellas Sevilla, invitado
por Al Mutamid y la taifa de Mallorca. Falleció en Montíjar, Huelva en el año 1064.
La célebre quema pública de sus libros en Sevilla le inspiró un conocido poema
que dice:
«Dejad de prender fuego a pergaminos y papeles,
y mostrad vuestra ciencia para que se vea quien es el que sabe.
Y es que aunque queméis el papel
nunca quemaréis lo que contiene,
puesto que en mi interior lo llevo,
viaja siempre conmigo cuando cabalgo,
conmigo duerme cuando descanso,
y en mi tumba será enterrado luego.»